Europa soportó ayer la última jornada de temperaturas extremas de una ola de calor que marcó registros históricos en Bélgica, Alemania, Luxemburgo, Holanda, Francia y Reino Unido, y que dejó dos víctimas mortales.
Autoridades meteorológicas alertaron ayer de fuertes tormentas, lluvias y vientos que darán tregua a los termómetros.
En Bélgica, las altas temperaturas cobraron ayer la primera víctima, una mujer de 66 años que murió mientras tomaba el sol en la región costera de Middelkerke, y en España un hombre de 85 años falleció en Granada debido a un golpe de calor tras una exposición prolongada al sol durante un paseo.
Este episodio tendrá, además, fatales consecuencias ambientales, según la Organización Meteorológica Mundial (OMM), pues amenaza con dejar la capa de hielo de la isla danesa de Groenlandia, que en lo que va del mes ha perdido 160 mil millones de toneladas en superficie, en mínimos históricos.
Clare Nullis, portavoz de la OMM, indicó que el aire caliente que se acerca desde el norte de África no sólo superó las marcas de temperatura en Europa el jueves, sino que las sobrepasó en entre dos y cuatro grados centígrados, algo que describió como “absolutamente increíble”.