En el Cerro de Paula, cercano a las pistas del aeropuerto de Santa Lucía, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) ha documentado 33 sitios de las culturas teotihuacana, tolteca y mexica.
Estos vestigios, asentados sobre 736 mil 714 metros cuadrados, obligarán a replantear el proyecto del aeropuerto General Felipe Ángeles.
En el oficio N° 401.3S.1-2017/1515, fechado el 28 de junio de 2017, consultado por Excélsior, se indica que los sitios más antiguos datan del año 200 a. de C.
No obstante, la identificación oficial de los lugares arqueológicos, a través de folios reales, del área aproximada, elementos que definen a cada sitio, cronología y asociación cultural, el INAH no ubica a estos sitios en ningún lugar específico ni da detalles.
El municipio de Temascalapa se eleva hasta los 2 mil 600 metros sobre el nivel del mar un cerro al que desde 1714, en tiempos de la Colonia, se le conoce como De Paula. Este macizo de piedra volcánica, que obligará a replantear el proyecto de diseño y construcción del aeropuerto General Felipe Ángeles, en Santa Lucía, reprogramada para junio próximo, es un diamante arqueológico en bruto.
Hay basamentos de al menos 33 estructuras arqueológicas de las culturas teotihuacana, tolteca y mexica, aunque aún hay varias sin definición cultural, que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) tiene documentadas en el Registro Público de Monumentos y Zonas Arqueológicos e Históricos, consultado por Excélsior.
En el oficio N° 401.3S.1-2017/1515, fechado el 28 de junio de 2017, el Centro INAH Estado de México estableció que los 33 sitios arqueológicos registrados en el área del Cerro de Paula y sus alrededores, están considerados en el Plan de Desarrollo Urbano Municipal de Temascalapa.
En el inventario que hace el INAH, menciona que el municipio de Temascalapa tiene 109 registros de inmuebles arqueológicos y 30 están registrados como “Cerro de Paula”; otros tres sólo se les ubicaron con numeración (11,12 y 13). Estos 33 vestigios ocupan una extensión de 748 mil 614 metros cuadrados, equivalente a 74 mil 86 hectáreas, o lo que es lo mismo a 104 veces el campo de futbol del Estadio Azteca.
Los sitios arqueológicos más antiguos encontrados en la región denominada por el INAH como “Cerro de Paula” datan del año 200 antes de Cristo, 200 después de Cristo (aunque el INAH coloca la inscripción “a.n.e”-“d.n.e.”).
Se trata de dos sitios. Ambos corresponden a la cultura teotihuacana; el INAH infiere que el contexto de éstos fue habitacional y están sobre mil metros cuadrados, uno y el otro sobre 7 mil metros cuadrados, según documentos oficiales.