Cuba quedó lista para volver a un sistema de gobierno con presidente de la República y primer ministro, tras aprobar ayer una nueva ley electoral que mantiene en el Parlamento el poder para elegir altos cargos, bajo la mirada rectora del Partido Comunista.
La nueva norma entró en vigor tras su aprobación, por unanimidad, en la primera sesión anual de la Asamblea Nacional (Parlamento), con la presencia del mandatario Miguel Díaz-Canel y de Raúl Castro, primer secretario de la gobernante y única formación política, el Partido Comunista Cubano (PCC), informaron medios locales.
La nueva ley restituye los cargos de presidente y vicepresidente. Estos serán elegidos entre los diputados para un mandato de cinco años y un máximo de dos periodos.
El Consejo de Estado queda en manos del presidente de la Asamblea Nacional, con función legislativa.
Desde el punto de vista del sistema electoral y democratización del sistema no hay muchos aportes”, dijo el constitucionalista cubano Julio Fernández Estrada.
También se crean las figuras de gobernador e intendente provincial, designados por las asambleas municipales.
Según adelantó en junio pasado el presidente de la Asamblea, Esteban Lazo, la elección del presidente de la República será en octubre y la del primer ministro, antes de fin de año.
Según la nueva ley, la Asamblea Nacional tendrá 21.6% menos miembros a partir de 2024. Pasará de 605 a 474 diputados, mientras el Consejo de Estado disminuirá de 31 a 21.
Cuba tiene 168 municipios, los cuales estarán representados por al menos dos diputados en el Parlamento.
Se reduce el número de diputados aunque sigue siendo una asamblea grande”, dijo Fernández.
“La gente esperaba un poco más, elección directa de gobernadores, del Presidente de la República, eso no pasó y no va a suceder porque la Constitución no lo contempla. No son cambios profundos”, agregó el constitucionalista cubano Julio Fernández Estrada.